Luz Cantillo, administradora de nuestro Centro Juvenil y Biblioteca Las Mañanitas, comparte las experiencias con los estudiantes de Las Mañanitas que hacen su servicio social en el Centro.
El servicio social de este año empezó con mucha actividad y un poco diferente a los años anteriores. Y es que estamos trabajando con estudiantes de servicio social no solo de universidades, sino de escuelas secundarias del área de Las Mañanitas.
Se trata de jóvenes estudiantes que van al Centro, solos o en grupo, y que están culminando su secundaria. Esto imprime un giro interesante porque además de que son del mismo entorno en el que se desenvuelven los visitantes del Centro, son jóvenes que tienen las mismas inquietudes de esa edad temprana. Llama la atención que se identifican rápidamente y se conectan con ellos en muchas actividades, incluyendo las deportivas.
El personal del Centro sigue atento el trabajo de los voluntarios y les aconseja que dentro de sus pláticas les hablen sobre la importancia del estudio y cómo ellos han ido logrando sus metas. Conviven día a día con ellos porque a los jóvenes les toca realizar 80 horas de trabajo voluntario. Esas horas les dan un toque de alegría a su servicio social, sobre todo en el verano porque en la época de vacaciones pueden realizar más actividades al aire libre. Los estudiantes de servicio social de escuelas de Las Mañanitas son muy cariñosos con los niños porque ususalmente los conocen del área.
Por otro lado, tenemos estudiantes universitarios de áreas cercanas, y algunos que vienen de áreas más lejanas, que igual le imprimen mucho dinamismo a lo que realizan y se llevan al final muchos amigos.
Nos sentimos contentas porque dentro de los chicos que realizan su servicio social queda la sensación de haber contribuido con un granito de arena; nos recuerdan con cariño, tanto al personal como a los niños. Nos visitan, sobre todo los del área. Ya llevamos dos años que una estudiante universitaria nos apoya con su lente mágico para tomar cada detalle en la fiesta de final de año del Centro. Adempás, este año un estudiante de secundaria que ya había realizado su labor social, se unió en una actividad que trajo Día a Día. Y estos son solo algunos ejemplos del trabajo fructífero que realizan los voluntarios en el Centro.
Es un apoyo que siempre esperamos que venga porque nos ayuda mucho a todo el personal en esta labor diaria con los niños y jóvenes que nos visitan. Y es que es de suma importancia para el Centro recibir estudiantes universitarios, estudiantes de colegios públicos y privados, y particulares para apoyar en las diversas actividades que realizamos.
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